Hola a todos. Me llamo Manu Sierra y, con vuestro permiso, me voy a hacer
cargo de la sección de Hardware de Musicareas.
Como otros muchos, comencé a estudiar Música de crío
y, con la afición que tenía por todo aquello con botoncitos
y lucecitas no es de extrañar que, con el paso del tiempo, entrase en
contacto con estos trastos dejados de la mano de Dios que son los sintes,
grabadoras, ordenadores, etc. Fue hace unos diez años.
Contaba quince añitos y no sabía en que lío me metía;
además, por partida doble: en primer lugar, por dedicarme a tocar
verbenas siendo todavía tan crío -sí, como Migui,
yo también flipé cuando me vi entre aquella panda de melenudos-
y, en segundo lugar, por los dichosos trastos. Es que te vuelven loco.
¡NO HABíA CRISTO QUE ENTENDIERA EL DICHOSO MANUAL DEL T3! Que si
TVA, que si LFO's, que si osciladores, que si depth, que si feedback...
y pa más inri en inglés. Pero, pero... ¡si yo lo que quiero
es tocar! ¿Dónde hay que darle para que suene? No os digo nada
cuando llegaba el jefe, te ponía frente al Atari y te soltaba como
quien no quiere la cosa: "Tío, el teclas es el que se encarga de
preparar los midis y pasarlos al Datadisk, osea que cúrratelo...".
Ejem, sin comentarios. Supongo que algo parecido nos ha pasado a todos,
al menos a la mayoría.
Por suerte, hoy en día las cosas han mejorado sustancialmente.
Cada aparatillo tiene su librillo -en spanish, claro- y la información
es mucho más accesible, gracias sobre todo a Internet. Existen
infinidad de sitios -también en castellano, para alivio de muchos-
donde conseguir material sobre secuenciadores, hardware, síntesis...,
con lo cual podemos introducirnos en este apasionante mundo de una manera
mucho más cómoda y fácil.
Por otra parte, las cosas han evolucionado de forma ostensible en estos
años, sobre todo en el ámbito de la informática. La línea
que separa hardware y software se ha ido haciendo cada vez más
difusa. Antes disponías de tu Atari para el midi, de tu sinte como
fuente de sonidos y de tu Tascam para grabar. Ahora tu ordenador puede
ser un completo estudio de grabación sin apenas auxilio de otros
elementos hardware. Puedes utilizarlo como sampler, cargar sintes virtuales,
grabar tus temas a audio, masterizar, quemar tus CD's... con un coste,
no voy a decir mínimo, pero sí bastante menor al que se
incurriría si empleáramos hardware. Existe una extensa oferta
freeware y shareware que, si bien no nos proporciona el potencial o las
funciones de un Cubase o un Logic, -de las cuales no aprovechamos ni la
mitad, por cierto- permite obtener unos resultados más que aceptables.
Se establece entonces el famoso dilema: ¿software o hardware? Hombre,
pues un poquito de todo, ¿no os parece? El software nos aporta flexibilidad,
versatilidad y ahorro económico pero, al menos hasta el momento,
no ofrece la robustez y fiabilidad del hardware y, desde luego, su viabilidad
para el directo es bastante cuestionable; la verdad, no me haría
mucha gracia un pantallazo azul en medio de una gala. La tendencia actual
en la mayoría de los estudios es la de dejar el ordenador para
midi y masterización y realizar el proceso de grabación
por hardware usando ADAT's o cualquier otro soporte digital, lo que, por
supuesto, no quita de que sigan existiendo los basados únicamente
en hardware o de que vayan surgiendo poco a poco aquellos apoyados completamente
en grabación a disco duro.
En conclusión, todo avanza que es una barbaridad y no nos queda
más remedio que adaptarnos. Como muy bien dice Albert, ya no es
posible discernir si somos músicos, técnicos de sonido,
informáticos... En fin, no os aburro más. A vuestra disposición
para todo aquello que preciséis. Y, bueno, cuando creáis
que os vais a volver tarumba de tanto manual, tanto aparatito, tanto programilla,
y tanto inglés, tomaros un respiro, dejad vuestra mente en blanco
y meditad sobre las sabias palabras del erudito:
"E mentalisarse, sano, se cuerpo, tené potensia, se felis, quererte
a ti mimmo a quererte tu musho, quererte a tu y ar que tiene' a tu lao,
y to' sale de verdá de deporte."
Bye. Manu. ;)
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